“… Fomento decide hacer una declaración
pública sobre la problemática electoral… el levante de periodistas para
publicar nuestra posición al respecto. Se acuerda invitar-retener a dos
periodistas. Uno nacional y uno internacional.
El de acá sería Antonio Mercader… El internacional sería, Michelle Ray que
estaba de visita en Uruguay y que antes había estado secuestrada por el Viet
Cong, también con la intención de difundir ideas…
… Sin embargo en el momento de la operación Mercader no aparece en el lugar…
… el levante de Michelle Ray ya está en marcha. Se golpea la casa donde está
parando… La dueña de casa, María Ester Gilio, se enoja un poco… Los
compañeros, en especial el “Gaucho” Idilio, amplían las explicaciones y acto
seguido se hacen acompañar por la periodista.
… Ray fue encapuchada, trasladada al lugar establecido donde se le mantiene
todo el tiempo: en el (sic) “pieza-pozo”…
… La conversación la realizarán Nando y Rogelio.
Michelle Ray fue una secuestrada de lujo. Se retuvo a esta elegante y
simpática periodista sólo un par de días. Después de lo que formalmente era
la declaración de prensa se conversó con ella por varias horas… se interesó
por detalles acerca de la militancia, de cómo transcurría nuestra vida en
estas condiciones especiales… ”.
(Mechoso, Acción directa
anarquista. Una historia de FAU, Montevideo, Uruguay, Editorial
Recortes, pp 402-405). |